Una noche cualquiera, arrullándome con el sonido del televisor, pasaron un comercial de la marca Ésika que terminaba con su slogan “Be what you want”… y de repente en mi cabeza empecé a cantar otro slogan que ya había escuchado “Sé lo que quieras ser, sé una Barbie Girl”
Me pareció curiosa tal coincidencia, dos marcas distintas, dirigidas a públicos distintos, vendiendo el mismo el concepto. Pero luego me di cuenta que realmente estas marcas no son tan diferentes, ambas venden una idea muy parecida de mujer, su estética tiene los mismos estándares y quieren mostrar que su producto va más allá de la apariencia física. Es decir, promueven a la mujer como profesional e independiente pero eso sí, nunca fea.
Es como si quisieran desmitificar eso de que las mujeres bellas son brutas (lo cual me parece muy bien), pero nadie ha querido desmitificar aquella otra idea de que las mujeres no tan bien dotadas físicamente no pueden ser exitosas ni felices.
Obviamente la comunicación de estas dos marcas se diferencia porque se dirigen a públicos diferentes. Mientras Ésika usa colores rojos y oscuros, y mujeres reales exitosas y bellas; Barbie presenta escenarios más fantasiosos con mucho y empalagoso rosa, y obviamente a sus muñecas como mujeres exitosas y como ejemplos a seguir por las niñas.
Es decir, muy seguramente las más aficionadas a Barbie serán clientes de Ésika en unos cuentos años.
Pero bueno, volvamos a lo del slogan… la verdad es que quisiera saber que pretenden realmente con tal mensaje. Claramente es un concepto empoderador para las mujeres, pocas veces se ha dicho a una mujer que sea lo que quiere ser, pero detrás de ese empoderamiento vienen muchos estereotipos que no sé si me gustan tanto. Es como si dijeran sólo la mitad del mensaje, como si el slogan completo fuera: “Sé lo que quieras ser, pero dentro de estos estándares”.
El problema es que esos estándares, finalmente, no nos muestran mujeres reales. Las mujeres reales somos muy diversas, conozco muchas a quienes les gusta parecer Barbies y, está bien, si eso es lo que realmente son, pero por ejemplo yo confieso que hay días en los que no me provoca ni peinarme, ni maquillarme, ni ponerme ropa ajustada… definitivamente no soy una Barbie girl ni una mujer Ésika.
Lo que quiero decir acerca del concepto que venden estas dos marcas es que sigue siendo reducida la visión de mujer y me preocupa, sobre todo, el desarrollo de millones de niñas que crecen pensando que siempre tienen que verse preciosas para lograr sus objetivos, que el color de las niñas es el rosa, que deben andar por ahí siempre sonrientes, oxigenadas, llenas de felicidad, con muchos pretendientes, ser profesionales exitosas, tener un consultorio rosado, entre otras.
En fin, son muchos estereotipos que no ayudan a nuestras niñas a enfrentar el mundo real y que impiden que ellas vayan descubriendo cómo son en realidad, por fuera del mundo de Barbie. Que color les gusta que no sea rosado, que ropa les gusta que no sea parecida a la de Barbie… cosas tan simples como esas.  |
| Barbie Girls |
En cuanto a Ésika, creo que su público es más exigente y analítico, sin embargo, me sigue pareciendo muy curiosa la gran coincidencia que tiene con Barbie girl.
Mujeres, sean lo que quieran ser: Barbie girl, Ésika girl o real girl.
Para entender más el alcance de estos slogans los invito a visitar:
El problema son los estereotipos, realmente no podemos encauzar al ser humano en una linea de modelos de produccion, aburrido es estar con una mujer que adora sus uñas, su peinado, su vestido pero que en su interior tiene tanto vacio como soledad siente cuando se mira al espejo.
ResponderEliminarMe gusta como escribes, sigue adelante.