julio 25, 2010

El Blackberry me recuerda cada vez más a Wall-e ¡Qué miedo!

Mundo artificial en Wall-e

Cuando tuve la oportunidad de ver la película “Wall-e” hubo algo especialmente sorprendente para mi. Las personas, que tuvieron que crear un mundo artificial luego de destruir la vida en este planeta, se comunicaban única y exclusivamente a través de medios electrónicos.


A pesar de tener a otra persona al lado, los seres humanos perdieron la capacidad de percibirse, de tener contacto personal con el otro y de socializar de manera personal. Se convirtieron en simples cuerpos inservibles con vidas virtuales.

Justo cuando me vi la película, empecé a tener contacto con toda esta moda del Blackberry, y de repente, empecé a notar que en las reuniones o en las salidas con amigos, la gente suele prestar más atención al sonido de su aparato que a la voz de su interlocutor.No es que yo esté en desacuerdo con la tecnología, de ser así, no tendría un blog para escribir lo que pienso acerca de estos temas, pero sí tengo la firme convicción de que hay que tener cuidado con los espacios que empieza a permear la tecnología en nuestras vidas.


Los avances tecnológicos tienen lugar en todos los aspectos de nuestra cotidianidad. El contacto indirecto con otro ser humano ha facilitado muchos aspectos de nuestras vidas, incluso ha hecho más fácil la guerra: en estos tiempos, los rivales no tienen que mirarse a los ojos para matarse, y esto hace que no sea tan evidente que estás matando a un ser humano, sólo estás eliminando al enemigo.



Esto mismo sucede con el establecimiento de amistades y relaciones de pareja: es más fácil decir te amo por un chat, que hacerlo mirando a los ojos la otra persona. Es más fácil ponerse máscaras por medios virtuales que personales, en fin, la barrera tecnológica facilita las relaciones en la medida en que nos sentimos protegidos de la influencia y la percepción del otro.

En este sentido y volviendo a la película, por demás recomendada, hay una escena que me marcó especialmente: por casualidad y error, una persona toca a otra, y de repente se percatan de la existencia del otro, de su mirada… por primera vez han dejado de mirar a la pantalla que contiene su vida artificial y han comenzado a sentir su propia vida.

A pesar de estar tan cerca, no hay contacto
visual, táctil o auditivo.
Obviamente,Wall-e muestra un caso extremo comparado con el fenómeno del Blackberry y otros tipos de comunicación virtual, pero lo que quiero resaltar es que debemos estar atentos para tener control sobre el lugar que le damos en nuestras vidas a este tipo de tecnologías.

Estas herramientas de comunicación son medios y no fines, el ser humano es gregario por naturaleza y chatear con tu mejor amigo nunca será lo mismo que hablar frente a frente con él y que te de un abrazo cuando lo necesitas.

La comunicación humana es muy compleja y se compone de muchas dimensiones que van a más allá del intercambio de mensajes en un idioma común. La impersonalidad que generan los medios electrónicos no puede convertirse en la regla de las relaciones.

Démosle a cada cosa su lugar y entendamos que el ser humano merece y necesita mucho más que la socialización por medios electrónicos como el Blackberry, y que cuando tengamos a otro ser humano frente a nosotros, este siempre merecerá toda nuestra atención.

No esperemos, como en Wall-e, que la impersonal vida virtual nos arrebate las sensaciones y percepciones de nuestra apasionante vida real.

6 comentarios:

  1. Cordial Saludo:

    Estoy totalmente de acuerdo con este artículo, tengo un grupo de amigos que de hecho ponen en peligro la seguridad de ellos y otras personas por mirar que comentarios han hecho en sus fotos o quien le habla por el Facebook Chat ... (es importante aclarar que esto lo hacen a horas pico mientras manejan sus autos camino a sus casas) ante este hecho pienso que es relavante generar puntos de discusión sobre como los medios son herramientas y no fines ... excelente Artículo felicitaciones a la autora

    Juan Guillermo Gallego Álvarez
    Comunicador Corporativo
    Universidad De Medellín

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  2. Juangui, muchas gracias... espero tenerte muy seguido por aquí, recuerda inscribirte para recibir las publicaciones en tu e-mail.

    Muy importante eso que dices de la seguridad, no lo mencioné en el artículo y te agradezco que lo pongas sobre la mesa.

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  3. Hola,
    Felicitaciones por tu artículo, bien escrito, sólido, con argumentos claros, imposible no darte la razón.
    El asunto de la alteridad de Levinás, empieza a alterarse, descubrirme a mi mismo en el otro puede pasar a través de la tecnología, no se puede decir que no, sin embargo los medios electrónicos restan humanidad, minimizan a las personas, ya el otro no es una persona, un ser humano tridimensional, vivo, alegre, con brillo en los ojos y pasa a ser su alter ego a través de una minuscula foto en la pequeña pantalla de un BB, se pierde un nombre que da identidad y muestra trascendencia y se convierte en un pin, o en el mejor de los casos en un seudónimo, a veces ininteligible, y el cuento de las comunidades cerradas, micro elites se fortalece, no por los lazos de la comunidad física, sino por un remedo virtual, controlable, auditable, censurable, no por sus miembros, sino por los dueños de los canales, ominiprescentes dueños de todo.
    Tal vez las personas no saben o no leen (mejor) las letras pequeñas, o simplemente dicen que aceptan las condiciones sin siquiera leer cuales son y eso favorece a esta sociedad de control.
    Tú sabes lo paranoíco que soy, y a mi si me parece muy raro que entre más nos comunicamos, más aislados estamos, tú lo dijiste, el ser humano es gregario, nos gusta juntarnos para socializar, para jugar, para contar chistes o resolver problemas... ¿Qué va a pasar entonces cuando no queramos hacerlo? Wall-e es bonita y la moraleja es clara, pero yo le apuesto más al libro de Eli o incluso a Mad Max.
    Abrazos, y sigue con lo tuyo, lo haces muy bien.
    George Herrera

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  4. Creo que la tecnología evidencia cada vez más el miedo que tenemos a relacionarnos; por supuesto que es mucho más riesgoso tener al frente un interlocutor físico con todas sus dudas, dolores, alegrías y contradicciones, que tener una pantalla en donde estamos a conveniencia. La tecnología también nos hace más parecidos a lo que no somos y estar más distantes de lo que somos, a la vuelta de un click por ejemplo, está un cambio radical de todo…apariencia, círculos sociales, relaciones, tenemos la posibilidad de husmear en la vida del otro, de ser excluyentes o infranqueables de manera sutil y sin contraprestación alguna.

    Para las nuevas generaciones es más temprana cada vez la invasión tecnológica, mejor que montar en bicicleta es jugar XBOX o chatear o descargar cualquier cantidad de cosas por internet, pasamos de ser activistas de la vida a simples espectadores sedentarios de emociones virtuales.

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  5. Muchas gracias por su participación. Esto enriquece mucho más los temas... espero que sigan pasando por este gallinero.

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  6. Un artículo recomendado y relacionado con el tema. Una sociedad sin abrazos y sin vinculaciones emocionales http://www.revistadiners.com.co/nuevo/interna.php?idn=779&idm=3

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Muchas gracias por tu Cacareo. Espero que te suscribas al blog y recibas mis publicaciones en tu e-mail.

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